Lo que parecía un imposible se hizo realidad. Al final, después un duro año, dejamos todo aquí en Madrid, y tabla bajo el brazo nos fuimos a pasar unos magníficos días en Coruña.
Hicimos un primer alto en Oporto, para dejar cerrada una espinita que tenía yo pendiente desde hace tiempo. Paseo por la Ribera del Douro, visita a las bodegas, y buen balacalao a braz, acompañado de vinho verde.
Ya en Coruña la tónica fue bastante sencilla, levantarse tranquilamente y prepararse para la playa. Hizo sol toooodos, menos una mañana que llovió para luego despejar.
Mi idea de "todos los días a surfear", se pudo cumplir, ya que aparte de buen tiempo, entró mar todos los días. Unos más, otros menos...
Pero siempre había un baño.
Tuvimos un par de días que no hubo huevos a echarse, de los cacho olones que entraban, pero se cambió por sendas tardes de de cerves y sol hasta desaparecer por el horizonte.
12 octubre 2009
Y nos Fuimos de Veraneo
Publicado por Manu en lunes, octubre 12, 2009
Etiquetas: Viajes
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