26 mayo 2008

R.A.C.E. 08 - 2ª Carrera - Nubes y Claros

Viernes por la mañana y suena el teléfono.
Alberto.
Descuelgo, un saludo y me pregunta si he visto el tiempo.
Pues no.
Dan lluvia.
En serio??
Sí tío, va a hacer malo.
Dame un minuto que lo miro en internet.
Uff, que mala pinta.

Me pregunta que, qué hacemos, y yo le respondo que con lluvia yo no corro ni loco. Él asiente y está de acuerdo.
Con esas, decidimos cargar las motos y ver qué pasa.

Madrugón de sábado, como siempre, y coño!!
Parece que quisiera abrir, hay ciertos claros y nuestros ánimos se levantan.
De camino al circuito, vemos un peazo Arco Iris chulísimo sobre Madrid y nos quedamos maravillados.
Ohh!!
Que chulo.
Sí, juer mira!! Si se ve entero!!
Que pasada!!!

Para darnos cuenta a los poco segundos que ese fenómeno se produce gracias a la refracción de la luz sobre…
El que??
Pues sí, sobre las gotas de agua.
Noooooo!!!
Llueve, joder!!




Total que llegamos al circuito y se pone a llover, descargamos las motos y a pasar las verificaciones. Todo correcto.
La estrategia muy clara: el circuito está empapado, así que no saldremos en la primera tanda, ya que es un peligro y encima no apetece montar “peludos”. Esperaremos a la segunda tanda y si seca saldremos.

Así que aprovechamos para dar un vistazo por todo el circuito, ya que había dejado de llover mientras la gente entrenaba. Jorge nos contó después que en su tanda cayeron 10 tíos de 30 que habían salido…
Hicimos bien.

Era tiempo de empezar a meditar y a trazar estrategias. Parece que el tiempo aguantaba y con el aire y unos pocos rayos de sol, la pista iría secando. Además había que contar con las rodadas de las motos.

Para la segunda tanda, sobre las 12, la pista no estaba bien, pero suficiente para salir a clasificarse. 20 minutos para un puesto en la parrilla.
Había que ser cauto, pero al tiempo quería estar lo más arriba posible.
Salí con calma, ruedas nuevas (en ppio pata negra), pista en condiciones complicadas y algunos regueros de agua, sobre todo en la Rampa Pegaso y en las eses rápidas antes de la Hípica.
En las tres primeras vueltas, la moto botaba bastante, sobre todo al pasar por las zonas húmedas. Estos nuevos neumáticos de Dunlop, funcionan con presiones muy bajas y hasta que no calientan, dan cierta sensación de ir con la rueda desinflada.

Poco a poco empiezo a apretar y no me encuentro del todo mal. Pegaso la hago por fuera para evitar la zona con agua, y el resto normal.
Como siempre, la gente en esta tanda empieza a ir muy, muy fostiada, y después de dar dos o tres vueltas buenas, me salgo.
Objetivo cumplido, ruedo en 57, lo justo para entrar en la Challenge.
;-)

Alberto por el contrario, vuelve a rodar un poco más lento y no entra en el corte. Joder, no conseguimos correr juntos ni a tiros!!

En este punto, veo claramente que en esta carrera no puedo forzar. Está habiendo muchas caídas y la pista no está para hacer el tonto.
Así que afronto la carrera con mucha tranquilidad.

El ranking de espectadores ésta vez es casi inexistente y se pasan un ratillo por los entrenamientos la hermana de Chini, su marido y los peques. Más ricos…
También viene Tomy, quien creo, se va a convertir en un incondicional.

En la carrera que nos precede, nada más salir se produce un gran accidente en la subida Pegaso y se tiene que detener. El reguero de agua parece que no existe, o la gente está muy tonta, porque no me explico que carrera tras carrera la gente se pegase tremendas ostias allí.


Con la premisa de la tranquilidad, y sin darme ni cuenta, se nos vuelve a echar el tiempo encima. Es hora de ponerse el mono, casco, guantes y retirar los calentadores.


Vuelta de reconocimiento y la pista tiene dos puntos negros, la Rampa y la recta que precede a la curva de entrada en meta, que tiene un charquito o humedad.
En la salida de la vuelta de calentamiento ensayo la arrancada y como siempre, sale bien.
Formamos de nuevo y, situado a la derecha, pegado al muro, tengo pocos huecos. Sólo puedo salir adelantando pegado al muro.
Inspiro profundo, la gente empieza a rugir con sus motos, miro el semáforo, me reclino hacia delante y...


Se apaga!!
Suelto embrague, acelero y sin salir bestialmente, voy ganando algún puesto. Estoy por el interior de la pista y busco hueco hacia el centro.
Llegamos a la frenada de la primera curva, cuando empiezo a reaccionar y sin tiempo a darme cuenta, empiezan como a carme meteoritos de todas partes!!
Una lluvia de motos se agolpa tratando de entrar por un sitio imposible pero allí nadie cede.
Un poco despistado, busco mi hueco y paso con cierta perplejidad y miedo por la tensa situación.


Tras la primera curva, gente intenta adelantarme por fuera, por dentro, pero qué coño, estoy en el sitio y voy a ceder.
Entro en la 2ª curva un poco abierto porque algúno intenta meterme la moto por el interior y es una zona muy peligrosa y rápida.
En la entrada al siete, cierro el hueco por la izquierda y entro alargando. Siguiente también la cierro y nadie entra.
Veo a Jorge, que me ha pasado y sé que es muy buena referencia, me pego a él y trato de seguir su ritmo. En el comienzo de la subida de la Rampa Pegaso derrepente veo como muchas motos por trazadas diferentes y muy lentas.
??¿?¿?¿?
Tras pensar en adelantar al algunos y esquivar a otros, me doy cuenta que ha habido ostión.
Un par de motos por los suelos.
Sigo y acelero fuerte.
Pienso en el temazo de Loquillo: "los muertos del arcén, no cuentan para aquel que ha nacido para correr".
Tras la primera vuelta voy rodando en una zona buena, y con posiblidad de progresar.
Al salir a línea de meta veo por el rabillo del ojo la bandera roja y la gente empieza a levantar la mano. Por unos instantes sigo a velocidad considerable por miedo a que alguien no haya visto la bandera y venga detrás mío fostiado.
Ya casi a final de la recta levanto también la mano y me doy cuenta que se va a volver a repetir la salida.


Mierrrrrda!!!


Había salido muy bien y me la había jugado con la gente tan tensa.
Imagino que con los entrenamientos tan complidados habría gente en la parte trasera con capacidad de rodar más deprisa, y habían salido a por todas.
Entrada a boxes y tras 5 minutos a repetir toda la parafernalia. Nueva salida y demás.
En la segunda salida no lo hice tan bien, y me lo tomé con más calma. Eso sí pillé una rueda muy buena que era la nuestro nuevo amiguete Litos, que llevó un ritmo fuerte y constante toda la carrera.


No cedió ni un ápice y no fuí capaz de engancharle. Imaginé que según pasaban las vueltas cedería terreno, pero que va.


También tuve un buen susto, cuando hubo otra salida de pista en donde??
Efectivamente, acertaste, en Pegaso.
Y me encontré la moto en un lateral de la pista. No tuve mucho problema en esquivarla, pero me dí un buen susto.
Al final quién cedió fuí yo.


A falta de dos vueltas, una vieja tendinitis en el hombro hizo acto de presencia y me costó muchísimo terminar la carrera. Me dejaba el brazo izquierdo casi sin fuerzas en las frenadas y tuve que bajar el ritmo.


En la última vuelta me confié ya que pensaba que no venía nadie detrás. Pero alguién me pasó al salir de la 1ª curva y me fuí a por él. Debía ser muy bueno el hijoputa, porque iba como de paseo, mirando a la grada, y como conduciendo con una sola mano. El caso es que me despistó un poco.


Luego pensé que a lo mejor era alguno bueno que se habría salido y venía remontando.


Ví que no le cazaba y ya en la bajada Bugatti el dolor de hombro era bestial. Decidí terminar con calma y saliendo a meta me quedé un poco en la parra, y justo antes de cruzar la línea veo otra moto que me adelanta sobre la misma meta.
Como!!!!
Menudo gilipoyas soy!!!
Me ha pasado por milésimas!!!


No puede ser, menudo imbécil soy. En ese momento me dí cuenta que como siempre recuerda Nieto: "una carrera no termina hasta que se pasa la bandera a cuadros".


Había perdido un puesto por no apretar hasta el final.
Lección magistral
En fín, quedé el 25 que no está nada mal, sobre todo pensando que con el tiempo que hacía era dudoso el poder correr.
Rodé en 53 en carrera, pero sobre todo, me dí cuenta de una cosa muy importante.
He vuelto a descubrir 4 puntos donde puedo ir más deprisa, y eso se traduce en segundos que me puedo quitar de encima.
Creo que esta carrera es un punto de inflexión desde donde alcanzar un nuevo nivel.


Ahora es tiempo de repasar cada centímetro de la pista y visualizar los puntos débiles para convertirlos en problemas solucionados.
Al final de la carrera, en la vuelta de honor, miré a la grada y...
Joder, si habían venido Palan, Talo y Rouser, Juanjete y un amigo suyo.
Qué bueno!!!


Tanta lluvia les había dejado sin trepar, pero me alegré porque tuve la oportunidad de que viniesen.
Más tarde corrió Alberto en la Mixta, e hizo una carrera de menos a más, en la que disfrutó y se fue soltando. Tras el accidente del mes de marzo, no ha tenido tiempo de rodar agusto.


Espero que la próxima carrera estemos allí juntos dándolo todo.

Ah, por cierto, hemos adjuntado un nuevo cargo dentro de la estructura. Chini a partir de ahora se convierte en la Manager del equipo tras sus contínuas aportaciones al bienestar y cuidado de los pilotos.:-)





Fotos por Chini

2 comentarios:

Chinita dijo...

Yoooooooouuuupi....!!!!

MANAGER...nás más y ná menos!!!!
la próxima habrá cerves y parillada...todo para mis pilotos...jejejeje

Besos

Manu dijo...

Que no falte de ná!!!
La próxima no envidiaremos al vecino de al lado.